lunes, 26 de diciembre de 2011

LAS MUJERES EN LA CIENCIA-FICCIÓN

El otro día alguien me preguntó que porqué no había dedicado alguna página del blog a las mujeres escritoras de Ciencia-Ficción. Confieso que simplemente es porque no se me había ocurrido. A diferencia de hace tan solo 30 años, hoy es casi irrelevante si un autor es hombre o mujer. No le va a ser más difícil a un escritor publicar su novela por el hecho de ser mujer. Hoy en día es normal que mujeres ganen el Hugo o el Nebula con tanta (o mayor) frecuencia que sus colegas hombres. Por otra parte, hay que admitir que esto es reciente. El campo de la CF, supuestamente más progresivo por lidiar constantemente con las cuestiones sociales del Mañana, en realidad siempre ha sido algo provinciano, si somos honestos, muchas veces pareciendo más el último reducto de niños temerosos de las niñas que otra cosa. (No es accidental que Asimov rarísima vez utilizó protagonistas femeninos, por ejemplo, o incluyó escenas sexuales en sus cuentos). Si la situación ha cambiado se debe a los esfuerzos silenciosos de un manojo de mujeres…


Supongo que toda conversación al respecto debe comenzar con la inmensa figura de Ursula K LeGuin. Su larga sombra se extiende inexorable sobre el género literario aun hasta nuestros días, y toda mujer que se atreva a escribir CF o Fantasía es juzgada (justa o injustamente) contra su ejemplo. Ya había mujeres que escribían y publicaban CF antes de LeGuin, por supuesto. Sin pensarle mucho se me ocurre el nombre de Leigh Brackett (a quien ya he mencionado con anterioridad en más de una ocasión), la creadora del legendario personaje Eric John Stark, entre otros muchos. A Brackett muchas veces se le subestima por que escribía cuentos baratos para las revistas peores pagadas, especialmente PLANET STORIES, con títulos tan estrambóticos como "Lorelei of the Red Mist", o "Queen of the Martian Catacombs", pero no olvidemos que el mismísimo Ray Bradbury también se empezó a hacer famoso en PLANET STORIES y era un fan confeso de los cuentos de Stark. Brackett además era guionista de cine, ayudando a William Faulkner (ni más ni menos) con THE BIG SLEEP, quizá la película noir por excelencia. No se nos vaya a olvidar que, treinta años después, Brackett también co-escribió una pequeña película no muy conocida llamada THE EMPIRE STRIKES BACK para un tal George Lucas.


Ejemplos como el de Brackett hay muchos. Desde Thea von Harbou (la autora de la novela corta "Metropolis" que sirvió de inspiración para su esposo Fritz Lang a la hora de hacer su famosa película muda), hasta CL Moore (creadora del aventurero planetario Northwest Smith, así como de Jirel of Joiry, una de las primeras heroínas del naciente subgénero de Sword & Sorcery en los años 30s y 40s en revistas como WEIRD TALES). Del otro lado del escritorio también la CF tenía a mas de una brillante mujer aportando su granito de arena. Judith Merril siempre fue una buena escritora, pero sin duda sus contribuciones más importantes fueron como editora. Desde 1956 hasta 1967 (y luego esporádicamente) publico una antología anual con Lo Mejor del Año en la CF, la primera en tener tal idea. Sus editoriales en esta serie, sobre todo, urgiendo y exigiendo mayores niveles literarios dentro del género, y criticando (casi regañando) a quienes no se molestaban en intentarlo fueron de una influencia incalculable para toda una generación de escritores, empezando por Silverberg. Ella fue la que inspiró en Harlan Ellison la idea de DANGEROUS VISIONS. Su antología ENGLAND SWINGS fue la que anuncio al resto del mundo la llegada del movimiento "New Wave" dentro de la CF. Y así podría continuar yo por un buen rato. Asimismo, Cele Goldsmith, la editora de AMAZING STORIES en la década de los 60s convirtió por si sola a la venerable, pero algo tediosa y tradicional revista en la indiscutible punta de vanguardia del genero de este lado del Atlántico. Siempre motivando a sus escritores (ferozmente leales, por cierto) a experimentar más y más. Inspirado por esta osada ambición, Cordwainer Smith empezó a publicar en AMAZING, y en ninguna otra parte, demostrando que la mediocridad de esta revista de los 15 años anteriores había quedado en el pasado. En un abrir y cerrar de ojos le robó el título de mejor revista a las otrora invencibles ASTOUNDING de Campbell, la GALAXY de Horace Gold y Fred Pohl, y a la F&SF. Autores que fueron descubiertos, y que le deben sus carreras literarias a Cele Goldsith y a nadie más, son Roger Zelazny, Thomas M Disch, Keith Laumer, Ben Bova, Piers Anthony y la misma Ursula LeGuin. Fue Goldsmith la que famosamente se tomo la molestia de sacar a Fritz Leiber de su borrachera de casi cinco años y obligarlo a escribir otra vez, ofreciéndole un numero completo de la revista a su obra, con tal de que volviera a escribir nuevo material. Los cuentos más famosos de Leiber sobre Fafhrd & the Gray Mouser, así como todo lo que vino en las siguientes dos décadas, fueron el resultado. Goldsmith fue la primera en publicar cuentos de JG Ballard en los Estados Unidos, asi como una de las primeras en importar material de Brian Aldiss. Etcétera, etcétera.


Sin embargo, para muchos, la mujer como escritora de CF, respetada por igual por críticos y fanáticos del genero, comienza y acaba (como ya dije arriba) con LeGuin y su espectacular arribo al final de los 60s y principios de los 70s. Muy sencillamente podría dedicar toda la página de hoy a su clásica THE LEFT HAND OF DARKNESS. Otra más a su THE DISPOSSESSED, y al enorme impacto que tuvo en la CF. (Otra más quizá a cómo personalmente prefiero en realidad sus primeras novelitas, mucho menos ambiciosas, pero ligeramente más animadas, como ROCANNON'S WORLD o PLANET OF EXILE). Ciertamente me podría quedar platicando sobre sus novelas de Terramár por el resto del día. (O de cómo solo encontró el éxito hasta que cumplió más de 40 años, después de décadas de escribir cuentos que eran rechazados uno tras otro). Pero asumo que los lectores del blog ya están más que familiarizados con ella.


¿Por qué no hablar mejor sobre Joanna Russ, quien casualmente falleció hace apenas unos meses? Una mujer quizá tan importante dentro del género como la misma LeGuin (la Señora Ursula sería la primera en admitirlo), pero jamás tan bien conocida. Probablemente la escritora mas feminista en la historia del género (a LeGuin como que eso no le importaba tanto), las historias de Russ no eran solo originales y entretenidas, sino que incluían además una agenda política que no a todos los lectores les parecía bien. Una perenne participante a la hora de los premios, ganó varios, como el Hugo a la Mejor Novela Corta en 1983 por su "Souls", pero supongo que su cuento más famoso continua siendo el que le acreditó ganar el Nebula en 1972, "When It All Changed" (incluido en el AGAIN, DANGEROUS VISIONS de Harlan Ellison), sobre un mundo en el cual una plaga aniquiló a todos los hombres hace 30 generaciones. Las mujeres en vez de desesperarse, han perfeccionado un rudimentario proceso de partenogénesis para poder reproducirse, y se casan entre si y viven en una sociedad agraria muy felizmente… hasta el buen día en que llegan un par de astronautas hombres de la Tierra. Para los pobres ancianos de la CF como Isaac Asimov, las escenas de lesbianismo fueron demasiado. Igualmente, quizá su mejor novela sea la famosa THE FEMALE MAN (aunque su PICNIC IN PARADISE fue más gustada), donde seguimos la vida de cuatro mujeres "distintas" en mundos paralelos. Pícaramente, uno de los 4 mundos es el mismo del cuento "When It All Changed". El titulo por supuesto ya nos dice mucho. Las opiniones de Russ acabaron por alienar a muchos lectores (masculinos así como, sorprendentemente, femeninas), pero aun si no estás de acuerdo con ella, si logras poner a un lado estos prejuicios, la obra de Joanna Russ vale mucho tu tiempo.


Un caso todavía más peculiar sería el de James Tiptree Jr. Así es, no me equivoqué de nombre. Tiptree, por supuesto, se convirtió en uno de los escritores más populares, mas seguidos, en la década de los 70s, y únicamente hasta finales de la década la gente se enteró que se trataba del seudónimo que utilizaba la escritora Alice Sheldon. Tiptree jamás hizo apariciones en público o en las convenciones, aun cuando mantenía una correspondencia entusiasta con sus lectores. Nunca les mintió. Únicamente no menciono que era una mujer. La gente estaba vagamente enterada que el nombre era un alias, pero existía la creencia que existía para proteger la identidad (y reputación profesional) de un oficial del gobierno que no quería involucrarse públicamente con algo tan infantil como la CF. Es bien conocido el caso de cuando Silverberg escribió la introducción a la colección de cuentos de Tiptree, WARM WORLDS & OTHERWISE, aseguró que basándose en el contenido de estos cuentos era imposible que el misterioso Tiptree fuera una mujer. Creo que hasta el día de hoy se lo mencionan entre risas a Silverberg cuando va a alguna convención. Desconozco si Silverberg también ríe cuando esto sucede. Muy similarmente, Harlan Ellison opinó en su AGAIN, DANGEROUS VISIONS que "Kate Wilhelm is the woman to beat this year, but Tiptree is the man". Lo más curioso (o a la mejor no tanto) es que la obra de "Tiptree" en realidad no parecería a primera vista haber sido escrita por una mujer. Inclusive, chistosamente, por mucho tiempo se le consideró como un escritor muy varonil. No hay más que mencionar cuentos como el clásico "The Girl Who Was Plugged In" (que de hecho tiene los argumentos para considerarse como el primerísimo cuento Cyberpunk, años antes que William Gibson o John Shirley comenzaran a definir a aquel subgénero), o al aun más famoso "Love Is The Plan, The Plan is Death", o la melancólica "The Man Who Walked Home", para entender éste punto de vista. Y sin embargo, el muy macho "James Tiptree" también escribió pequeñas joyas como "The Women Men Don't See" (donde el protagonista masculino se desespera cuando las mujeres no reaccionan "como deberían" ante ciertas situaciones) que en retrospectiva revelaban la verdad. Lo cual no quiere decir que Alice Sheldon/James Tiptree escribía como una mujer intentando disimular su sexo. De la misma manera que las protagonistas de "The Women Men Don't See", la escritora no actuaba "como debería", y creaba obras a su manera, no como los hombres esperarían. Si vamos para el caso, sus ideas sobre la sexualidad eran ambiguas. Basta leer su novela corta "Houston, Houston, Do You Read?" (uno de los cuentos de CF más famosos y reimpresos en la historia) para ver esto. Es decir, Sheldon/Tiptree era un autor que vale la pena buscar, independientemente de si iba al baño parado o sentada…

Sería criminal de mi parte no mencionar al Premio James Tiptree Jr, creado por las escritoras Karen Joy Fowler y Pat Murphy en su honor, y que es otorgado cada año a la obra que "expanda o explore nuestros conceptos de género dentro de la CF". Hombres y mujeres por igual lo han ganado desde 1991 hasta la fecha. (Como debe ser...)


La página de hoy se podría extender bastante. Gracias a los esfuerzos de estas mujeres fue posible que los lectores (y editores) lograran aceptar a más y más mujeres dentro del campo de la CF. Tan solo listar sus nombres nos llevaría un rato. Desde Marion Zimmer Bradley, hasta Anne McCaffrey, pasando por CJ Cherryh, y Vonda N McIntyre, y Kate Wilhelm, etcétera. Lo que caracteriza a todas estas mujeres es… absolutamente nada! Nadie escribe cuentos mas distintos que los de CJ Cherryh que la talentosísima Vonda McIntyre, mientras que la obra de Kate Wilhelm no se parece en nada a la de alguna otra mencionada hoy. Las diferencias entre un cuento de Lois McMaster Bujold con uno de Octavia Butler son tan abismales que más bien podrían ser escritos por seres de distintos planetas! He visto cuentos de una enorme emotividad, así como descaradas aventuras que harían sonreír hasta a los lectores de PLANET STORIES de hace 50 años, todos escritos por mujeres. Si algún día ven un libro de Lisa Goldstein, comprenlo. Punto. ¿Una novela de Kathleen Ann Goonan? Comprenla. ¿Una colección de cuentos de Nancy Kress? Haganme caso y comprenla. No se van a arrepentir. ¿Acaso existe un escritor más galardonado en la CF que Connie Willis? La señora gana un Hugo o un Nebula cada año como reloj (a veces más de uno). Hay escritores que prefieren ni asistir a las entregas de premios si saben que su cuento o novela corta nominada está compitiendo contra Connie Willis. ¡En un momento de enorme justicia poética, muchas mujeres tampoco asisten por las mismas razones! Es decir, ya a nadie le importa si un escritor es hombre o mujer. Es verdaderamente maravilloso vivir en esta época.

En el género de la Fantasía esto es todavía más marcado. Inclusive se podría decir que hoy en día ese género es dominado por las mujeres, y lo ha sido por un buen rato. Y sin embargo… acaso hay alguien que no sepa que la razón por la que Joanne Rowling firma sus libros de Harry Potter como "JK Rowling" es porque sus editores (y ella misma) estaban seguros que los jóvenes lectores jamás leerían un libro escrito por una mujer??

Quizá mientras más cambia el mundo más permanece igual…

martes, 20 de diciembre de 2011

LOS DETECTIVES DE LA CIENCIA-FICCIÓN

Ayer me encontré con un artículo supuestamente inspirado por el estreno de la nueva película de Sherlock Holmes con Robert Downey y Jude Law. El propósito del mismo era el de listar a los otros mejores detectives privados en la literatura, específicamente en la Ciencia Ficción. Como podrán imaginar, los "sospechosos comunes" estaban presentes. Desde las novelas de Asimov sobre Elijah Bailey y R. Daneel Olivaw, hasta la larga serie de libros de THE DRESDEN FILES de Jim Butcher. El artículo es en realidad muy breve, y me hizo sonreír mientras recordaba algunos de los libros que menciona, pero personalmente, habría preferido algunas elecciones más originales.


La influencia de las novelas de Daneel Olivaw en el género son indudables, pero si me permiten un momento de pedantería, ninguno de los dos protagonistas es un detective privado. Los dos son policías. Estamos hablando de un subgénero completamente distinto (aunque con muchísimas similitudes, claro), igualmente valido por supuesto, pero sencillamente no el mismo. En efecto, las dos primeras novelas, THE CAVES OF STEEL y THE NAKED SUN son "police procedurals" que solo incidentalmente están situados en el futuro. (Famosamente, Asimov las escribió para demostrarle a su editor John Campbell que era posible escribir misterios dentro de los parámetros de la CF). Si a todo esto añadimos que el futuro creado por Asimov para estos libros no es exactamente el más imaginativo o siquiera original (bastante simplón, me atrevería a decir), descrito además con su característica prosa mediocre y habitado por sus típicos personajes unidimensionales, quizá entiendan porqué no es mi elección favorita para representar a la CF en este tipo de listas. Si fuéramos a escoger un police procedural de CF yo preferiría mil veces THE DEMOLISHED MAN de Alfred Bester que, más de 50 años después de ser publicado, sigue siendo una de las novelas más visionarias que el género jamás produjo. O si prefieren algo más nuevo, la reciente THE CITY & THE CITY de China Mieville no le pide nada a nadie.


Igualmente, los libros de Jim Butcher sobre el detective hechicero Harry Dresden investigando crímenes sobrenaturales en el Chicago de nuestros días, a pesar de su enorme popularidad, siempre se me han hecho sobrevaluados. Segundo, no son CF ni pretenden serlo. Alguien debería avisarle al que preparó la lista. Originalmente una ingeniosa mezcla de elementos fantásticos con prosa Chandleresca, en mi opinión Butcher ya acabó por gastar la formula. Algún crítico una vez los resumió como "Dirty Harry Potter". La descripción, podrán adivinar, no era enteramente bien intencionada. Para el caso prefiero las novelas de Glen Cook sobre Garret P.I. que por lo menos se enfocan más en los aspectos detectivescos que en la acción tipo Dirty Harry, aun con las hadas y vampiros y demonios a su alrededor. Inclusive las irreverentes historias del investigador drogadicto Cal McDonald escritas por Steve Niles, ya sea en prosa o para los comics se me hacen una mejor opción.



Aparte de estas elecciones no muy originales, el artículo incluía un par de errores. Marid Audran, el protagonista de la extraordinaria novela WHEN GRAVITY FAILS de Effinger, en realidad no es un detective privado (aunque de hecho si acaba intentando resolver una serie de homicidios), mientras que Anthony Villiers, el extravagante héroe de las novelas de Alexi Panshin es más bien un aventurero vagabundo, una especie de Simon Templar futurista mezclado con un toquecito de Bret Maverick (aunque aquí si le doy crédito al autor del artículo. Tiene años que no escuchaba a nadie siquiera mencionar estos libritos). De la misma manera, THE YIDDISH POLICEMEN'S UNIÓN de Michael Chabon es una fabulosa novela, pero no es exactamente un misterio, o por lo menos ese no es el punto de la historia. En resumen, me acabó molestando la lista en sí. Ya sé que el autor probablemente solo quería entretener por unos minutos y nada más. Sus intenciones eran buenas, con toda seguridad. El problema es que mucha gente, deseosa de sugerencias, utiliza este tipo de listas como referencia.



Si yo hiciera una lista similar, por lo menos intentaría empezar con algo diferente. Algo no tan obvio. No se me ocurre un mejor inicio que la impresionante GUN, WITH OCCASIONAL MUSIC que Jonathan Lethem publicó en 1994. Lethem, por supuesto, se ha convertido en el consentido de los críticos en los últimos 10 años, comparado todo el tiempo con Michael Chabon, pero originalmente inició su carrera escribiendo novelitas baratas de CF. Esta es precisamente su primera, una parodia/tributo a la novela negra de los años 40s, que narra las bizarras aventuras de Conrad Metcalf, "inquisidor" privado. En el futuro de Lethem, todos portan tarjetas de karma (a las cuales las autoridades les pueden restar puntos en caso que rompas la ley), los animales son capaces de recibir inteligencia rudimentaria (como pueden apreciar en la portada, uno de los gangsters de la novela contrata canguros armados como guardaespaldas y matones) y poseen derechos y garantías en la sociedad igual que en las novelas de David Brin de los 80s, (efectivamente, ya no es "bestialidad" el tener sexo con un animal en este libro). Las pistolas incluyen un ominoso soundtrack de fondo. Hacer preguntas es considerado una grosería (imaginaran lo fácil que esto hace a la profesión de nuestro protagonista). Todo mundo es un adicto, y las drogas favoritas son Acceptol, Avoidol y Forgettol. Antes que se me olvide mencionarlo, nuestro protagonista tiene un… aparato reproductor femenino (en este San Francisco del día de pasado mañana las parejas intercambian sus zonas erógenas mediante cirugía en un acto de intimidad) pues su ex-novia se quedo con el suyo y se fue de la ciudad sin avisarle. En resumen, el futuro imaginado por Lethem deja al de Asimov (casi provinciano en comparación) muy, pero muy atrás. Por si todo esto fuera poco, la trama (resolver el asesinato de un prominente… urólogo) es endiabladamente complicada.

Antes que alguien lo mencione, en los 15 años desde que Lethem escribió GUN, WITH OCCASIONAL MUSIC nos presento ya a un detective privado más tradicional en su éxito de crítica MOTHERLESS BROOKLYN, con su Lionel Essrog, víctima del Síndrome de Tourette, pero desgraciadamente esa novela no es CF (aunque admitidamente es difícil de clasificar) así que no la puedo incluir aquí. Para el caso, la brillante idea de las tarjetitas de deuda kármica sería mejor desarrollada en su siguiente novela AMNESIA MOON con su "luck ratings". Esa novela, sin embargo, tampoco es de detectives privados, así que ya no hablaremos de ella hoy.


Otra posible elección que yo haría más bien sería el completamente sui generis Dirk Gently, el Detective Holístico de las novelas de Douglas Adams. Nuestro héroe, armado únicamente con la lógica, la ilógica, la filosofía zen, e inferencias sacadas de la manga, resuelve los casos más complicados, como el encontrar gatitos perdidos. En la conclusión del primer libro se convierte en el misterioso hombre que interrumpió famosamente a Coleridge cuando estaba escribiendo su poema de "Kubla Khan" (y gracias a esto impide que el fantasma de un extraterrestre, utilizando una máquina del tiempo para evitar que su nave espacial explote 4 mil millones de años en el pasado, coincidentalmente borre a toda la humanidad). De paso, salva al mentado gato, logrando cobrar su comisión. Si todo este sinsentido que acabo de describir les suena familiar, es porque Adams se inspiró ligeramente en su propio guion de "City of Death" que escribió para DOCTOR WHO en 1978, añadiéndole mil y un detalles de su fértil imaginación. Recordemos que Adams es el autor de la ya clásica "trilogía" THE HITCHHIKER'S GUIDE TO THE GALAXY (compuesta de cinco libros). Las tramas de estas novelas, si es que así se les puede llamar, son completamente no lineales y tienden a salirse por la tangente cada 5 minutos. En resumen, probablemente no sean lo que están buscando los aficionados del genero de los misterios, que usualmente prefieren sus historias funcionando con la precisión de relojería suiza. Por otra parte, si están buscando algo relacionado con el género pero distinto a la mayoría, algo así como la sublime NEW YORK TRILOGY de Paul Auster (que no incluyo en esta lista porque asumo que esa novela aparecería en todas las listas), les recomiendo estas novelas mucho.


Uno que seguramente también es conocido por todos, pero no por eso voy a dejar de mencionarlo, es a Takeshi Kovacs, el investigador privado de las novelas de Richard Morgan. La primera de estas novelas, ALTERED CARBON, es un verdadero triunfo, demostrando contra toda posibilidad, que el viejo género muerto del Cyberpunk todavía puede ofrecernos algunas sorpresas de vez en cuando. (Por supuesto, el Cyberpunk en sí, con sus protagonistas amorales, tramas enredadas y finales sin moraleja fácil, tiene una deuda bastante grande con el género noir de los años 40s, como William Gibson sería el primero en admitir). En este primer libro, un millonario patrón (otro elemento típico de la novela negra) es asesinado. Esto no impide que quiera averiguar quién fue el responsable, así que acto seguido contrata al cínico Kovacs para investigar su propio homicidio. La policía no quiere ayudar pues asegura que fue un mero suicidio (a pesar que la victima lo sigue negando tercamente). Kovacs, que por su parte ya murió también recientemente, y de una manera bastante desagradable, por cierto, debe aceptar el caso (así como una adicción artificial a la nicotina, cortesía de su nuevo jefe para tenerlo a raya). La vida del investigador privado en el universo noir nunca es fácil, ya sea situado en 1948 o en el 2148. (Pregúntenle a Conrad Metcalf, que anda buscando su aparato reproductor masculino por culpa de la mujer que lo traicionó). Por supuesto, hay una femme fatale en ALTERED CARBON. Hay una en GUN, WITH OCCASIONAL MUSIC si vamos al caso. Imposible tener una novela negra (o Cyberpunk) sin una. ¿Ya mencioné a la Inteligencia Artificial que cree ser Jimi Hendrix?


Finalmente añadiría otra serie que tampoco van a encontrar en este tipo de listitas ni de broma: las novelas de John Zakour sobre Zachary Nixion Johnson, el "last private eye on Earth". El pobre Zachary debe  viajar de un planeta a otro resolviendo crímenes de toda índole, en libros con títulos como THE PLUTONIUM BLONDE, o THE DOOMSDAY BRUNETTE, o THE RADIOACTIVE REDHEAD. Como los nombres les indican ya, se trata de un universo descaradamente arrancado de las páginas de las revistas más baratas de la era del Pulp. El tipo de historia que uno podía encontrar en publicaciones como PLANET STORIES, pero nunca en la ASTOUNDING de Campbell. Historias que no se toman a sí mismas muy en serio, y que por eso mismo logran divertirnos como pocas otras. Tristemente, las portadas baratas y los títulos estrambóticos tienden a alejar a los lectores mas payasos, que ni por accidente quieren ser vistos comprando o leyendo semejante material en público, lo cual es una verdadera lástima porque además de estar muy bien escritas estas novelas de hecho son bastante inteligentes, exigiéndole bastante a los lectores. (Irónico pues el típico lector de misterios si quiere ser exigido)

No sé, a la mejor añadiría la KILN PEOPLE de David Brin de hace como 10 años. Quizá A QUANTUM MURDER de Peter Hamilton (aunque en realidad detesto a su protagonista Greg Mandel. De sus tres novelas, esta es la única que más o menos tolero. Habiendo dicho esto, los misterios en si son bastante buenos, debo admitir).

En fin, mi punto es que me gustaría que estas listas de "Las 10 Mejores Novelas de… lo que sea" no siempre escogieran el mismo material una y otra vez; los mismos libros que ya todos conocemos hasta el cansancio, sino que de vez en cuando nos ofrecieran alternativas nuevas. Inclusive hablarnos de novelas que uno ni siquiera ha escuchado con anterioridad. También me gustaría que hubiera paz mundial y que pusiéramos a un hombre en Marte. En fin, podemos soñar…

lunes, 5 de diciembre de 2011

LA VERDAD SEGÚN PHILIP K DICK

Confieso que lo primero que pensé cuando vi anunciado por primera vez en Amazon el libro THE EXEGESIS OF PHILIP K DICK, fue que accidentalmente había caído en alguna especie de simulación artificial de la realidad, como las que tanto le gustaban al maestro. Busqué en vano en otras páginas de Amazon para ver si ya estaban a la venta los aerosoles de Ubik, o por lo menos la droga Can-D. Pero no, ni siquiera los muñequitos de Perky Pat. Aun así, decidí comprar el librito (de tan solo mil páginas) y el lunes pasado llegó a mi casa.


Por supuesto, imagino que todos los lectores de este blog están por lo menos familiarizados con la historia (más bien leyenda) detrás de esta obra. Esencialmente, Philip K Dick fue al dentista un buen día de 1974, para que le quitaran una muela del juicio. Lo que pasó a continuación sigue siendo materia de debate. O Dick tuvo una verdadera experiencia religiosa, una epifanía camino a Damasco, o simplemente Dick (nunca la persona más estable que digamos) perdió la cordura. Intentar afirmar o defender cualquiera de las dos posiciones usualmente te acaba metiendo en problemas con los seguidores de Dick hoy en día. Es casi como reírse de un Cientólogo (por cierto, otra religión iniciada por un escritor de CF). En resumen, no lo haces sin antes pensar bien las consecuencias. La diferencia, claro, es que Dick en realidad no comenzó una nueva religión para otros. Solo para sí mismo.



Dick afirmó que había experimentado un estado que etiquetó como "anamnesis", una palabra griega que literalmente significa la pérdida del olvido (el olvido del olvido, mas al caso). Gracias a esto, se "acordó" de quien era en realidad y cómo era el mundo que lo rodeaba en realidad. Algo que el resto de la gente (nosotros, vaya) habíamos olvidado desde hace mucho tiempo. Hay que mencionar que también creía que agentes del FBI, o más bien los soldados del imperio romano (que en realidad nunca había caído), lo perseguían y observaban todo el tiempo. En resumen, era difícil saber si Dick, que toda su vida sufrió de desordenes mentales, muchas veces reflejados en sus cuentos y novelas, no había sufrido sencillamente un colapso nervioso. Lo que es innegable es que aun si esto es cierto, Dick nunca perdió esa claridad de auto-análisis que siempre caracterizó a su obra.



Esto es importante, ya que todo lo anterior fue tan solo el comienzo. Durante varias semanas experimentó varias visiones, incluyendo un haz de luz atravesando su cabeza y llenándolo de información. Siendo un escritor por naturaleza, Dick inevitablemente intentó dar forma a todas estas experiencias usando papel y pluma. Desde 1974 hasta 1982, el año de su temprana muerte, pasó todas las noches encerrado en su casa escribiendo y escribiendo obsesivamente su Exégesis (a veces más de cien páginas en una sola noche de insomnio), básicamente un diario de ideas y pensamientos sobre todo tipo de temas epistemológicos y ontológicos bajo el sol. Intentando una y otra vez describir lo que él y nadie más parecía ver. Una mezcla de intima confesión personal, sorprendente escolaridad esotérica, relatos de sueños fugaces, etcétera. En total más de ocho mil páginas. Los enormes poderes de la imaginación de Dick fueron probados hasta el límite por este reto.


Por supuesto, la mayoría de estas 8000 páginas parecían ilegibles. Ciertamente impublicables. Sin embargo, gran parte de la filosofía que Dick desarrolló en estos años logró aparecer de una forma u otra en novelas como THE TRANSMIGRATION OF TIMOTHY ARCHER, o THE DIVINE INVASION y, sobre todo, en VALIS, en mi opinión quizá la mejor novela que jamás escribió. (Aunque admito que libros como THE MAN IN THE HIGH CASTLE o THE THREE STIGMATA OF PALMER ELDRITCH son más divertidos, y ciertamente es mejor empezar a leer a Dick por ahí).




Efectivamente, hasta que se publicó este libro hace tan solo un par de semanas, los únicos  fragmentos de la Exégesis de Philip K Dick que habían logrado llegar directamente a las manos de los lectores habían sido gracias a IN PURSUIT OF VALIS: SELECTIONS FROM THE EXEGESIS, que apareció en 1991. Como el titulo ya nos lo está indicando, desgraciadamente, tan solo una ínfima parte del pensamiento de Dick se podía encontrar en sus 278 páginas.


THE EXEGESIS OF PHILIP K DICK tampoco reimprime aquellas 8000 páginas que Dick garabateó durante casi ocho años, claro, pero casi casi. Este primer volumen (de dos, el próximo será publicado el siguiente año) incluye en sus 1056 páginas supuestamente todo lo que Dick quiso plasmar en papel sobre su epifanía. Los editores Jonathan Lethem y Pamela Jackson han logrado una hazaña casi heroica, excavando a través de esta montaña de páginas escritas a máquina (y a mano muchas veces), desde cartas a amigos cercanos (los únicos con los que Dick compartía sus visiones), hasta ideas para posibles nuevas historias. El ultimo gran trabajo de un autor que dedico su vida a cuestionar la naturaleza de la realidad y nuestra percepción de la misma. Sin tener que nombrar títulos, recordemos al hombre que un día accidentalmente descubre que hay engranes y maquinaria dentro de su cuerpo y que la realidad a su alrededor es solo el producto de una cinta magnética en su interior. O el hombre que descubrió que todas sus memorias eran falsas y habían sido escritas por alguien más. O la diferencia entre un ser humano y otro que es solo una imitación. Todas estas son ideas familiares hoy en día, plagiadas por mil y un escritores menores. Todas estas ideas, además, son creaciones originales de Philip K Dick, quien las usó antes que nadie más.


Una enorme cantidad de películas están "basadas" (en mayor y menor medida, habría que aclarar, si somos honestos) en los textos de Dick, desde TOTAL RECALL y MINORITY REPORT hasta las más recientes THE ADJUSTMENT BUREAU ó NEXT, sin olvidar por supuesto a ya saben cuál. La mejor película Dickiana, sin embargo, es quizá THE TRUMAN SHOW, que nominalmente no está basada en ningún cuento o novela de Dick, pero que está completamente informada por su paranoica sensibilidad. (¡La escena cuando la luna llena en el cielo nocturno se convierte en un proyector de luz buscando al fugitivo Jim Carrey es un momento Philip K Dick por excelencia!)




THE EXEGESIS OF PHILIP K DICK es probablemente la presentación definitiva de la última gran obra de Dick. No solo intentando darle forma a sus complejas ideas filosóficas, sino ofreciéndonos además una fascinante rebanada de historia y autobiografía al mismo tiempo. Tan fascinante en su lectura como cualquiera de las novelas de ficción de Dick. Esto último es relevante sobre todo para la mayoría de los posibles lectores de estos dos tomos. Los que no conocen a Philip K Dick simplemente ignoraran estos libros de la misma manera que han rechazado toda la obra de Dick con anterioridad. Por el contrario, los seguidores fieles de Dick (y hay más de los que ustedes creen) no necesitan de ningún incentivo extra para empezar a devorar estos libros. La gran mayoría, por otra parte, imagino yo que quizá hayan leído un manojo de novelas de Dick, y nada más. Habrán visto BLADE RUNNER (y se habrán llevado la sorpresa de su vida si luego intentaron leer DO ANDROIDS DREAM OF ELECTRIC SHEEP?), a la mejor conocen algo de su vida, pero hasta ahí. Es decir, la Exégesis debe sostenerse no solo como un medianamente interesante tratado de filosofía psicótica, sino ser igual de atractivo que las excéntricas historias que Dick inventaba. ¡Porque seamos sinceros, al final del día a la mejor eso es todo lo que es! Por supuesto, es un verdadero placer reencontrarse con la prosa simplona (pero al mismo tiempo enmarañada) del buen Philip K Dick. Como un viejo amigo que sabemos de antemano le falta un tornillo, pero aun así nos cae bien y al cual hemos extrañado por demasiado tiempo. Algunos de los aforismos aquí reunidos son o increíblemente profundos o meras pachecadas. (Y aun si son lo primero, se leen como si el producto de una noche fumando demasiada mota). Por ejemplo este maravilloso tour-de-force que produce una sonrisa en mi cara cada vez que lo leo: "It is just as easy to think of the future pushing the present into the past as to think of the past generating the present and moving toward the future…"


En su búsqueda por la verdad, el libro incluye safaris oníricos que nos recuerdan más bien a "The Quest of Unknown Kadath" de Lovecraft, que harían que Jung se muriera de envidia. Los gérmenes de posibles novelas que tristemente nunca llegó a escribir. Todo eso y, más que nada, al mismo Dick gritando por ayuda. Es genuinamente conmovedor lo honesto y vulnerable que es Dick en estas páginas; cómo logra desnudarse ante nuestros ojos en su frenética búsqueda por esa Verdad final que siempre lo eludió. En mi humilde opinión, su extraña odisea concluye (en cierta forma) alrededor de la pagina 827, con un Dick cansado y exhausto y empapado en sudor cosmológico, con este simple pasaje: "Why am I so joyful? I am celebrating a victory and can now stop work -- finally -- and relax. Why? Because I did my job and I know it." Por supuesto, es difícil saber con exactitud a qué se refería Dick, pero lo que si conocemos es que Philip K Dick falleció dos semanas después, a la temprana edad de 53 años.

Si alguno de nosotros pudiéramos viajar en el tiempo de vuelta a 1974 y asistir alguna Convención de CF y  preguntarle a cualquier de los presentes si creían que el escritor de semejantes novelitas baratas como CLANS OF THE ALPHANE MOON ó (por amor a dios) THE ZAP GUN, iba a ser el objeto de estudio académico 40 años después, o convertirse en figura de culto literario, se habrían reído de nosotros y nos habrían sacado a la fuerza para que se nos bajase la borrachera. En cierta forma, estoy seguro que Philip K Dick habría apreciado esta ironía mejor que nadie…